¿Qué es la carencia en un préstamo?

El periodo de carencia en un producto financiero como un préstamo personal o una tarjeta de crédito es un plazo de tiempo durante el cual puedes cargar compras a tu tarjeta y esperar a pagarlas sin que se te cobren intereses.

El periodo suele durar al menos 21 días y se extiende desde el final de un periodo de facturación hasta el siguiente pago.

Contabilizar

Puedes averiguar la duración del periodo de carencia de tu tarjeta -y si tu tarjeta lo ofrece- consultando el cuadro de las condiciones de tu tarjeta. Debajo de la información sobre la TAE, suele haber una línea que explica cómo puedes evitar el pago de intereses.

Si no ves una línea que explique cómo puedes evitar el pago de intereses, es una señal de alarma. Podría significar que tu tarjeta de crédito no ofrece un periodo de carencia. En ese caso, tus compras empezarán a acumular intereses el primer día de cada transacción, incluso si pagas todo el saldo antes de la fecha de vencimiento.

Asegúrate de leer atentamente las condiciones. En algunas tarjetas, puedes encontrar que solo algunos titulares tienen un periodo de carencia. Ten en cuenta también que únicamente las nuevas compras tienen un periodo de carencia. Los anticipos en efectivo y las transferencias de saldo empiezan a acumular intereses en cuanto llegan a tu cuenta.

Cómo funciona un periodo de carencia

Durante el ciclo de facturación de tu tarjeta de crédito, cualquier compra que realices se registrará en el historial de transacciones de tu tarjeta de crédito y se añadirá al saldo de tu extracto mensual.

Sin embargo, si has estado pagando los saldos del extracto en su totalidad cada mes, el emisor de tu tarjeta no te cobrará intereses por las nuevas compras que realices durante el periodo de tiempo en que el periodo de carencia siga activo.

Así, por ejemplo, si empiezas un ciclo de facturación con un saldo de 0 euros, puedes comprar un sofá de 800 euros y dejar que se cargue sin pagarlo hasta que venza el saldo de ese ciclo.

La trampa: los periodos de carencia solo están garantizados si sigues pagando tus saldos mensuales en su totalidad. Si un mes únicamente pagas una parte del saldo (por ejemplo, solamente pagas el importe mínimo adeudado), tu prestamista puede cancelar el periodo de carencia y cualquier nueva compra que hagas después empezará a acumular intereses inmediatamente.

Una vez que hayas perdido el periodo de carencia de tu tarjeta de crédito, puede que tengas que esperar unos cuantos ciclos antes de que vuelva a empezar. Consulta con el emisor de tu tarjeta para obtener más detalles.

Cómo aprovechar al máximo tu periodo de carencia

Puedes utilizar el periodo de carencia de tu tarjeta en tu beneficio para ayudar a financiar brevemente nuevas compras. Es como pedirle a alguien un préstamo y prometerle que se lo devolverás en un par de semanas. Si cumples el plazo prometido, únicamente tendrás que devolver lo que hayas tomado prestado.

Así que, si tienes un gasto previsto próximamente, como billetes de avión o un nuevo electrodoméstico, puedes esperar estratégicamente a realizar esa compra hasta después de que se cierre tu ciclo de facturación. Eso te dará todo el tiempo posible para aplazar el pago de la compra sin incurrir en intereses.

Pero recuerda: solo obtendrás esa ventaja si sigues pagando tus saldos en su totalidad. Si no puedes hacer el pago antes del final del ciclo de facturación, entonces pagar en efectivo los grandes gastos probablemente ayude más a tus finanzas.

Cómo funciona tu ciclo de facturación

Es habitual referirse a un periodo de facturación como un ciclo de un mes. Pero con las tarjetas de crédito, la realidad es un poco más complicada.

Cuando abres tu cuenta en una empresa de tarjetas de crédito, las compras que hagas en ese primer periodo de facturación se añadirán al saldo de tu extracto y se incluirán en tu factura. Pero una vez que se cierra ese ciclo de facturación (lo que significa que la factura se ha sumado y está en el correo), cualquier compra que hagas después se añadirá al extracto del saldo del mes siguiente.

Así, por ejemplo, si el periodo de facturación de tu tarjeta de crédito termina el 23 de cada mes, cualquier compra que hagas el 24 o el 25 se facturará el mes siguiente. Y carencias al periodo de carencia de tu tarjeta, no tendrás que pagar un cargo financiero por esas compras hasta tres semanas después, cuando venza tu factura.

Escrito por:

Adela Viñas Redactora especializada en Finanzas

 

Preguntas frecuentes

Un periodo de carencia suele durar entre 25 y 55 días. Ten en cuenta que el periodo de carencia de una tarjeta de crédito no es una prórroga de la fecha de vencimiento. Si pagas menos del saldo total, no pagas una tarjeta de crédito o pagas la factura con retraso, el emisor de tu tarjeta de crédito te cobrará intereses.

Este periodo de carencia significa que tienes 10 días desde la fecha de vencimiento para realizar el pago y evitar los recargos por demora.

No. Un pago con un día de retraso no afecta a la puntuación de crédito. Un pago atrasado no se comunicará a las agencias de crédito hasta que haya transcurrido 30 días de retraso, es decir, que haya pasado una segunda fecha de vencimiento. Esto también podría provocar el impago de un préstamo, dependiendo del tipo de préstamo y de las condiciones acordadas.